Llueve en la ciudad medieval.La calle esta desierta,al contrario que su cabeza,inundada de errores y decisiones que fluian sin control y desbordaban su mente.Ella corria.No estaba cansada no le dolian las piernas solo queria llegar antes,ir mas rapido, ¿ a donde iba? Iba sin rumbo,pero no queria que el viento la llevara a ninguna parte,no queria su ayuda,ni de él ni de nadie.Las cosas que dejaba,las cosas que la dejarian,solo eran personas sin alma.Ella solo corria,solamente eso.No queria encontrarse con nadie,no queria huir de nada,supongo que queria liberarse por unos instantes del agobio, del malestar,de la inseguridad,del bochorno, del dioxido de carbono, de los ruidos por la noche, de las sonrisas falsas y corazones repartidos, o alomejor solo queria correr.
Pero la pregunta no era el por qué si no cuando,¿cuando frenaria? Ella ahogó un poco mas su mente y con ella el alma.A lo mejor ella tenia la culpa,todo el mundo estaba a gusto menos ella, indignarse y empujar sentimientos falsos es la solución,aunque al fondo se escuchara el estruendo de un corazón roto a pedazos, hacer lo que todo el mundo hace,porque ella realmente no era diferente,lo unico que hacía era huir corriendo.Paró en seco y callo en el frío y desolado suelo de piedra, decidió secar su mente,hacer entrar gente sin alma y darle una nueva que tapó y en realidad siempre estuvo, así silenció su mente y escuchó una imperfecta y maravillosa melodía acustica acompañada de la suave voz de un hombre,dejo de ver salpicar sus sentimientos y se puso a observar el agua resbalar de la boca de aquellos caballos de piedra.Se tumbó en aquel frío y humedo suelo,para dejar delado al orgullo,la tristeza y el malestar y entregarse a las estrellas.
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