
Cada vez amanecía más y la claridad dibujaba el contorno de aquel ser.Pero no quería ver aquella cara que tanto agredía mi alma y despreciaba mi existencia,era suficiente con el frío de su mirada.
Así,a escondidas,llegó el día.Y amanecí en mis sábanas,no me hizo falta abrir los ojos para reconocer su tacto,el olor de mi fiel habitación,el ambiente de mis cuatro paredes,el humo había desaparecido,volvía a sentirme cómoda.Pero aun con temblor me costó abrir mis ojos,por la posibilidad de volver a encontrarme con los suyos,pero no,ya no estaba.Y una sensación de alivio recorrió el camino de los pasados escalofríos.
Pero de repente,mi cabeza volvió a jugármela,llenándose de dudas hasta desbordar.Y es que inexplicablemente,me sentía vacia y a la vez llena de una emoción,la de la añoranza.Porque,por alguna loca razón,me había enamorado de aquella mirada ¿Cómo puede alguien enamorarse del miedo ?¿Como pude volverme adicta a lo que nunca habría querido?Durante más de una pareja de años busque la respuesta y me atormenté a mi misma,como sustituyendo a ese ser cada día,hasta conseguir salir de ahí ,de mi misma ,para poder encontrarme luego.
Aún no me he encontrado,pero ya voy por buen camino,he aprendido a no temer al miedo,me he fortalecido,ahora me pertenezco.
Grita alto,muy alto,para que hasta la luna te escuche.Que todos sepan,pero sobre todo tú, que a nadie perteneces,tu eres el dueño de tus actos,o no,pero solo tú tienes la decisión de que hacer con tu alma.Avisa al mundo de que se prepare para el primer bocado.
Os quiero,porque sois fuertes.